Historia del T-BOW®
LA HISTORIA DE LAS T-BAND
Bandas Elásticas T-BOW®
Inventadas por Viktor Denoth
Desarrolladas por Viktor Denoth y Sandra Bonacina
Sandra Bonacina quería tener la posibilidad de un entrenamiento de fuerza variado con niveles individuales y con incrementos graduales del rendimiento. Dos metros de bandas elásticas son suficientes para pasarlos por los agujeros en el medio de los lados del arco y tener dos bandas separadas en cada lado. Así se podía coger una banda para un entrenamiento más fácil y dos bandas para uno más fuerte.
A continuación Viktor Denoth perfeccionaba las bandas elásticas, de manera que más de una y dos podían ser introducidas en los programas de entrenamiento. Una cinta fuerte por debajo del T-BOW® conectaba tres cintas de 1 metro en cada lado, las cuales eran pasadas por los agujeros del medio de los lados.
La idea de Viktor Denoth de reciclar pelotas de tenis viejas que sujetan tres bandas fue un éxito decisivo en 2006. Desde entonces la durabilidad de las bandas es mucho mayor. Otra gran ventaja es que las bandas simple rotas pueden ser reemplazadas fácilmente y así se reducen los costes de renovarlas.
Para las sesiones fitness en grupo, donde es importante el cambio rápido de un ejercicio a otro, lo mejor es utilizar las T-Bands profesionales, una simple y una doble unidas a una pelota de tenis. Son bicolores: 1 metro de naranja y 2 metros azul, formando un bucle. Así es posible cambiar rápido de 1 a 2 ó 3 bandas, variando los niveles de fuerza requeridos.
LA HISTORIA DEL T-BOW®
Inventado por Sandra Bonacina en 1995
Desarrollado por Sandra Bonacina y Viktor Denoth
Los balones de gimnasia grandes son populares para el entrenamiento en el ámbito de la fisioterapia, pero necesitan mucho espacio, son relativamente blandos y poco reactivos para fijar bien las partes del cuerpo, y son difíciles de transportar. En su lugar, Sandra Bonacina buscaba un arco simétrico y simple.
Cuando en 1994 fue construido en Schlieren, Suiza, el Centro de Rappel-Escalada y Montañismo, Viktor Denoth descubrió algunas hojas de contrachapado curvo (láminas de madera curvas), hechas de varias capas de madera pegadas juntas, que eran utilizadas para los salientes en las rutas escarpadas. Sandra Bonacina y Viktor Denoth calcularon y probaron el mejor radio y pronto construyeron el primer arco de entrenamiento multifuncional para el entrenamiento y la terapia motriz (1995).
En la universidad de Zürich y en la Asociación Académica de los Deportes de Zürich (ASVZ) se les ofreció la oportunidad de introducir el T-BOW® para probarlo como medio de entrenamiento en circuito y como instrumento para reforzar los músculos de torso en la sala de gimnasia. Desde 1996, el arco ha llegado a ser un aparato muy usado para el refuerzo abdominal, de espalda y de los músculos laterales del tronco.
Sandra Bonacina quiso hacer más con este instrumento y tuvo la idea de agregar agujeros en los laterales del arco para poder incorporar a los ejercicios de entrenamiento las bandas elásticas de resistencia. Así todo el cuerpo podría ser entrenado con más alternativas.
Asimismo, quiso utilizar también ambos lados del arco; un lado como un “step” para el entrenamiento de “cardio” y "tonificación y movilidad del tronco", y el otro lado como un subebaja o balancín para el entrenamiento del equilibrio y la coordinación en balanceo. Viktor Denoth hizo una cubierta antideslizante para el lado cóncavo del arco. Ahora el arco se convertía en polivalente y multifuncional para el entrenamiento de la fuerza, la resistencia, el equilibrio, la velocidad-reactividad y la flexibilidad.
El Prototipo había sido creado y estaba listo para ser patentado.
La "T" en el T-BOW® significa arco ("bow") de Entrenamiento ("Training" y también arco ("bow") de Terapia ("Therapy").
T-BOW® · Training and Therapy Bow
T-BOW® · Arco de Entrenamiento y Terapia
El T-BOW® fue desarrollado durante más de 10 años (1994-2006) por Sandra Bonacina con la colaboración de Viktor Denoth, ambos profesores universitarios en el Institute of Movement and Sports Sciences de la Universidad de Zurich.
Desde 1996 ha sido utilizado en las salas fitness y de gimnasia de la universidad de Zurich como material de reforzamiento de la musculatura del tronco y de entrenamiento del equilibrio global de la espalda.
En el 2005 se completa una fase avanzada del meticuloso e intensivo desarrollo de las posibilidades de aplicación multifuncional del T-BOW®. Sandra Bonacina experimenta con estudiantes colaboradores de la universidad de Zurich las múltiples formas de implementación del T-BOW® en el ámbito del fitness y de la salud, especialmente su implementación en sesiones grupales fitness, y su uso se consolida de forma efectiva en los centros deportivos y de fitness de toda Suiza.
Por otro lado, a partir del T-BOW® original cronstruido de madera natural en 1995 se diseña un prototipo de fibra sintética (HDPE polietileno de alta densidad) que posee la ventaja de una extraordinaria resistencia a cargas elevadas, su facilidad para mantenerse higiénico y limpio, y su mayor practicidad para apilarse de forma segura (2006).
T-BOW® MADERA NATURAL DESDE 1995
T-BOW® FIBRA SINTÉTICA DESDE 2006
El T-BOW® es un invento original suizo de Sandra Bonacina (profesora universitaria de fitness y fisioterapia), desarrollado con Viktor Denoth (profesor universitario de deportes), desde 1995,
producido en Suiza y testado en la Universidad de Zurich (ETH/ASVZ Academic Sports Association Zurich).
Movimiento · Vitalidad · Diversión
Viktor Denoth and Sandra Bonacina
Swiss Mountains · Zurich University · Switzerland
“Con el T-BOW® tenemos un maravilloso material para hacer mover a las personas. Movimiento significa estar vivo y sano. Nos sentimos afortunados de aportar salud y reducir el estrés con programas de alta calidad para entrenar todos los aspectos de la condición física y la estabilidad profunda de las articulaciones. Así muchas personas tienen menos problemas de espalda usando el T-BOW®. Es fantástico que lo podamos usar en todas las edades y grupos. Estoy convencida que el T-BOW® será una referencia en todo el mundo por su alta calidad probada durante años“ (Sandra Bonacina, 2010).